El tiempo pasa rápido, ya son dos años desde que partiste y aquí estoy, recordándote y tratando de dibujar tu vida allá donde te encuentras.
Tengo entendido que para ser un ángel se deben pasar por diferentes etapas e imagino o, al menos procuro, crear una imagen tuya en mi mente. ¿Cómo será tu apariencia? ¿Qué estás aprendiendo? ¿Quiénes te apoyan? ¿Estás con mi mamá? ¿Reciben ayuda, de quiénes, de la familia?
Para mí ha sido muy fuerte tu partida, pero estoy empeñada en sacar algo positivo, si es que puede haberlo. Creo que eres privilegiado, al igual que los que ya se fueron. Ustedes tienen la posibilidad de cumplir años dos veces.
Mañana comeremos lo que tanto disfrutabas: arroz y chicharrón en salsa. Más tarde, llegarán tus amigos de la prepa, del Colegio Holandés.
Para festejar tu nuevo cumpleaños, tendremos un pastel de vainilla y estoy pensando cómo hacer para dibujar unas alas de ángel en la superficie. Eso ya lo resolveremos mañana y tú estarás junto a nosotros, en nuestros pensamientos y nuestras palabras.
¿FELIZ CUMPLEAÑOS MI ÁNGEL!.
